La experiencia de voluntariado de Suela en Burgos

23 febrero 2024 marina

Suela llegó desde Albania a Burgos en junio del año pasado para realizar su voluntariado europeo en Voluntared, para realizar actividades con niñxs. Después de unos meses aquí, nos ha querido contar como está siendo para ella vivir esta experiencia en el extranjero:

«El voluntariado en el extranjero abarca multitud de experiencias. Aunque la idea inicial puede ser la de participar en un proyecto solidario, el viaje ofrece inmensas oportunidades de aprendizaje, crecimiento y desarrollo profesional.

Creo que el viaje es un proceso de introspección. A medida que trabajas y conoces gente nueva cada día, caes de forma natural en el hábito de repasar, revisar y reflexionar sobre las cosas, y la cantidad de aprendizaje es inigualable. El voluntariado nos permite poner en práctica nuestras aspiraciones; acciones impulsadas por el amor, la compasión, la comprensión y la voluntad de cambiar y tener un impacto positivo en nuestras comunidades locales y más allá.

Por eso, vivir y hacer voluntariado en el extranjero es siempre una buena idea. Además, muchas veces toda la experiencia se siente como un retiro personal, ya que tienes la oportunidad de viajar, visitar nuevos lugares, conocer gente nueva y disfrutar de la vida cultural de la ciudad.
Me alegro de haber dicho que sí precisamente a esta oportunidad. Me siento afortunada por la gente que he conocido, agradecida por las cosas que he aprendido y agradecida por los retos.

Profesionalmente, siempre he temido ladrar al árbol equivocado. Siempre me ha parecido un poco irónico cómo, a medida que crecemos, pensamos que perseguimos nuestras pasiones, pero a menudo acabamos haciendo lo que siempre nos enseñaron. Esas ideas de lo que podríamos llegar a ser están tan arraigadas e impresas en nuestras mentes que somos incapaces de ver más allá de ese futuro proyectado que nos impusieron la cultura y la sociedad cuando éramos niños. Se necesitan algunas pruebas y errores para redescubrir nuestro camino y reorientar nuestros esfuerzos hacia cosas que realmente resuenen con nosotros. Y a mí, esta experiencia me ha dado eso, la oportunidad de invertir mi tiempo, energía y conocimientos en áreas que me apasionan.

Embarcarse en nuevos comienzos nunca es fácil, pero así es como la vida pone a prueba nuestra perseverancia. Los retos derribarán las fronteras de nuestras zonas de confort, permitiendo la creación de nuevos espacios por los que navegar libremente con más confianza y seguridad.

Mirando hacia atrás en mi viaje, es divertido ver cómo una ciudad que antes me resultaba desconocida se siente ahora como en casa. No sé qué me deparará el futuro, pero me alegro de que el presente me ofrezca una experiencia inolvidable que sin duda recordaré».

Suela

ASOCIACIÓN BRÚJULA INTERCULTURAL

“Nuestro destino nunca es un lugar, sino una nueva forma de ver las cosas”