Del 27 de Abril al 08 de Mayo de 2023, Elaine, Irene, María, Marta, Paula y Sergio, participaron en el Intercambio Juvenil #Erasmusplus “Changing The Narratives”, coordinado por Primi Piani en Galbiate, Italia, para tratar el tema de la salud mental a través de la novela gráfica y el cómic.
“36 jóvenes se encuentran por primera vez en un bonito lugar llamado Monte Barro, rodeados de lagos y montañas. Ese es el momento en el que la magia comienza. Ellos van a compartir una maravillosa experiencia aprendiendo de cada uno. Con el propósito de hablar sobre salud mental a través de la novela gráfica ellos dejarán huella en sus vidas y en un trocito de mundo.” Este fue el texto creado en una de las primeras actividades realizadas en el proyecto, llamada “Mission Impossible”, la cual consistía en completar una serie de acciones, tales como crear una coreografía grupal, hacer una lista con las redes sociales de los participantes, inventar un saludo, dibujar un mapa del mundo y localizar los países de procedencia de los participantes o crear una historia corta sobre el proyecto, entre otras, en menos de una hora.
Fuimos seis españoles los participantes seleccionados desde Brújula Intercultural para comenzar esta aventura. Las expectativas del proyecto eran altas, siendo sinceros, ya que trataba un tema tan interesante como importante, la salud mental, y además lo hacía a través del cómic y de la novela gráfica. Estas expectativas se acabaron cumpliendo gracias a que el proyecto “Changing the Narratives” se compuso de actividades muy dinámicas, divertidas e incluso algunas bastante profundas, ayudándonos a romper el hielo, a conocernos mejor y a crear un lazo entre todos los participantes.
Nos gustaría destacar también la increíble ubicación del «Ostello Parco Monte Barro«, un lugar mágico que hizo del proyecto algo mucho más especial. Estábamos en plena naturaleza, casi en la cima del monte en Galbiate, situado en la región de Lombardía. Nos encontrábamos con la montaña prácticamente para nosotros, y con unas increíbles vistas a los lagos, incluso desde algunas habitaciones. No se puede describir con palabras, pero todos coincidimos en que sentimos una gran paz en aquel lugar, alejados del ajetreo de la ciudad, y disfrutando de su tranquilidad, acompañados de varios animales que nos hicieron muy felices, como Canela, la perrita de uno de los coordinadores, Fede, y varios gatos de la zona.
En cuanto a la comida, solo nos salen palabras de agradecimiento para los cocineros Fede y Rapha, dos grandes profesionales que cocinaron para 40 personas, adentrándonos con muchos de sus platos en la cocina típica italiana. Además, supieron adaptar los platos a un menú vegetariano y gluten free muy completo.
Retomando las actividades del proyecto nos llamó la atención lo novedosas que eran para la mayoría de nosotros, y no se hacían pesadas, ya que lo organizaron de una manera en la que todo estaba en su justa medida. Se agradeció el tener un calendario de antemano para poder conocer las actividades que nos esperaban cada día. Los coordinadores fueron muy respetuosos también con nuestras necesidades y cuidaron de nosotros en todo momento.
Destacamos la actividad “Mission Impossible», la cual sirvió para la unión del grupo y el trabajo en equipo, así como otras actividades como la de dibujar nuestros retratos entre varias personas mientras se contestaban preguntas, las meditaciones guiadas a través de un dibujo, el río de la vida, la actividad sobre las tribus, y muchas más. También nos introdujeron en el mundo del arte a través de la actividad World Café, en el mundo del cómic a través del Fotoromanzo y en el dibujo a través de talleres de iniciación, pues muchos sabían dibujar, pero otros tantos no. Esto fue muy útil para darnos cuenta de que realmente cualquier persona es capaz de realizar un boceto, sea de la forma que sea, que no hay un único estilo válido, y que se puede dar vida a cualquier personaje dibujado con cariño. Finalmente llegó la actividad estrella, que fue la de la creación de una novela gráfica tratando cualquier tema que nosotros quisiéramos, siempre relacionado con la salud mental, de la cual se crearon obras realmente asombrosas. Ahí fue cuando nos dimos cuenta de que nos habíamos juntado grandes artistas con una gran sensibilidad por el tema de la salud mental.
También tenemos que destacar la maravillosa compañía, ya que todos los miembros del proyecto fueron increíblemente abiertos y nos sentimos como si nos conociéramos de toda la vida, formando un vínculo real, principalmente dentro del grupo español. Muchos participantes teníamos diferentes cosas en común, lo cuál ayudó a crear ese vínculo tan fácilmente. Y no sabemos si fue debido a la temática del proyecto, pero todo el grupo estuvo formado por personas sensibles y cuidadosas al mismo tiempo, que respetaban los ritmos de cada uno y se esforzaban por entender a los demás.
Además, tuvimos la suerte de poder conocer más sobre las diferentes culturas, costumbres y gastronomía de cada país involucrado en el proyecto, durante las noches interculturales, siendo la primera de España, Estonia y Alemania, y la segunda de Italia, Letonia y Suecia. En ellas nos divertimos mucho, aprendimos, bailamos, cantamos…
Los coordinadores, Milena, Fede y Fra, fueron increíbles y se convirtieron en amigos, pero sobre todo en grandes inspiraciones. Fueron parte del grupo, y no les veíamos como una figura de poder, si no como compañeros. Y aunque hubo días en los que estábamos agotados, gracias a ellos, no queríamos volver a casa, sino continuar aprendiendo y seguir trabajando en nuestros procesos creativos. El proyecto era simplemente un lugar de amistad, creatividad, respeto y arte. Y es que hemos encontrado muchos participantes, a los que podemos llamar amigos, y con los que hemos compartido conversaciones, risas, lloros, bailes, canciones…. No hubiese sido lo mismo si no hubiésemos estado todos juntos, a pesar de ser difícil relacionarse con las 36 personas participantes, la sensación de grupo, de familia, de comunidad, fue inmensa.
Queremos destacar también que tuvimos un maravilloso día libre en el que pudimos visitar más toda la zona del lago de Lecco, y visitamos lugares preciosos como Lecco y Varenna donde fuimos al jardín botánico Villa Monastero, del que guardamos recuerdos increíbles y fotos preciosas del grupo de los españoles.
Otro día destacable fue el penúltimo, en el que expusimos todas nuestras obras en San Donato Milanese para participar en la actividad de diseminación, gracias a la asociación SandoCalling, donde pudimos conocer a parte de la organización y a personas locales, y compartir diferentes workshops a la vez que nos divertíamos. Ver todas nuestras obras expuestas fue un sentimiento increíble.
Para alguno de nosotros, el proyecto nos ha ayudado a nivel personal a darnos cuenta de algunas heridas que teníamos que sanar, y de las que no éramos conscientes, gracias en parte a las actividades, como a los maravillosos, empáticos y respetuosos compañeros que compartieron sus experiencias con nosotros ayudándonos a crecer mucho más como personas y haciéndonos sentir queridos, seguros y apoyados.
De estos doce días nos llevamos tantas cosas, que todo lo que escribamos se queda corto, pero como conclusión diríamos que hemos aprendido sobre nosotros mismos y sobre las personas en un ambiente inolvidable, que además nos ha ayudado a reconectar con nuestra parte artística.
Muchas gracias por darnos la oportunidad de tener semejante experiencia!
Elaine, Irene, María, Marta, Paula y Sergio
